Tikal- Guatemala
Día de lluvia en Río Dulce
El cruce a Flores, Guatemala fue...largo. Navegamos unos treinta minutos por el río hsta donde salía el colectivo a Flores. En la aduana nos cobraron un impuesto al "turista", hablando un poco de Maradona y de los Pimpinela conseguimos un mejor precio. A partir de ahí el viaje fué larguisimo, algo así como cuatro horas en las que pinchamos una rueda. Al final, a la tardecita llegamos a Flores. La isla tiene un encanto muy particular, nuestro hotel era bastante sencillo, wi fi no andaba, el agua caliente tampoco y la última noche la luz del baño también dejó de funcionar.
Todo esto para ir al otro día a Tikal.
Tikal es enorme, creo que hay unas 4000 ruinas en algo así como 16km y la verdad es que tenés que estar todo un día para recorrer solo parte de las ruinas. Almorzamos atún, pan y tomates en el parque. El lugar es impresionante, igual mi preferido sigue siendo Yaxchilán.
Salimos bien temprano hacia Rio Dulce, apenas nos dejó el colectivo tomamos una lancha a Livingston pero a mitad de camino la lancha paró en un hostal soñado en el medio de la selva y decidimos quedarnos. Asique aca estamos, en Finca Tatin tomando un té, el lugar es bellísimo y aunque llovió todo el día, de a ratos sale el sol y pudimos andar en kayak y sacar algunas fotos. Livingston tendrá que esperar un par de días.
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